Mis bolas de pelos

Visito el Weather Channel infinidad de veces durante el día. Antes de verificar mi correo electrónico miro a ver como andará la temperatura y decidir que me pongo. Cuántas capas de ropa voy a usar. Esa época de ponerme lo primero que encontrara pasó hace mucho. Vestirme es todo un proceso. Primero, los “warmers,” que son como unos licra pero que calientan, vienen con diseñitos, distintos colores, tanto en blusa como en pantalón. Luego vienen las “turtle neck,” alguna t-shirt de manga larga y un abrigo grueso. Las medias tienen que cubrir la pata del warmer y entonces el pantalón. Encima de todo esto llevo el abrigo o gabardina hasta la pantorilla, mis guantes (a veces llevo dos pares puestos) más la bufanda. Si hace mucho viento me pongo un sombrero. Aún así siento frío. Le estoy dejando el sueldo a UGI, la compañía del gas para la calefacción. Las sensación térmica ronda entre los 20 y 30 durante el día y baja como 10 grados más durante la noche y la madrugada.
Parece que al agua le echan algo para que no se congele pues cuando salgo de darme una ducha me pica el cuerpo. Mi doctora dice que es que tengo la piel bien reseca. Debo encremarme por las mañanas y las noches. Los labios se me cuartean y me arden. El invierno es una especie de tortura. Tengo muy claro que si existiera el infierno el mismo sería un lugar bien frío, con mucho viento. Estoy bien quejosa hoy. Odio el invierno. Acabo de ver el Weather Channel...again! y dice que a las 6 am va a estar a 6 grados. En media hora empezarán a caer los “flurries” que es como escarchita, una nieve ralita. Noticia buena del día-Dey compró cinco plátanos por un dólar y comimos tostones con chuletas. Un banquete.