Monday, November 17, 2008

 

Reconciliación con mi blog

La vida es como estar dentro de una secadora. No sabes si en la próxima vuelta te va a tocar estar junto a un g-string fosforecente o junto a unas “panties” de abuelita. He tenido unos meses de silencio total. He estado escribiendo mucho. En junio presenté mi libro de poesía. Hice una edición limitada artesanal y tuvo bastante acogida. La cena de celebración fue magistral, la comida en el restaurante vietnamita al que fuimos fue riquísima. En febrero comenzó una etapa mala de mi vida y poco a poco he podido salir finalmente. Tal vez es la cercanía de mis treinta años pero comencé a cuestionarme seriamente si estaba dónde quería estar. Los que me conocen saben que para mi el periodismo ha sido vital e importante. Que me fajé para lograr ser editora de un periódico. Los últimos 10 años de mi vida han estado regidos en cumplir el sueño de mi abuela de que yo fuera periodista. Lo logré finalmente y tuve grandes satisfacciones en ese campo. Pero al cuestionarme hacia dónde iba descubrí que para seguir creciendo en el periodismo tendría que seguir haciendo grandes sacrificios. Tendría que volver a mudarme y comenzar de nuevo en otra ciudad con un mercado más grande, dejar los amigos atrás, vender mi casa. Además sentía que el sueño de mi abuela ya había sido cumplido y que a pesar de que sí disfrutaba el periodismo era a fin de cuentas el sueño de ella y no netamente el mío. Me sentía en una cajita diminuta y no podía moverme. Pensaba que ya lo había hecho todo y que la vida no tenía ningún sentido. Para hacer el cuento largo, corto. Ya no estoy en el periódico. No me visualizo como periodista el resto de mi vida. Ya cumplí con Mercedes, ahora quiero hacer mis propios sueños. No tengo idea de hacia dónde voy pero lo fascinante es que no me preocupa. Estoy siguiendo mi corazón. Estoy haciendo lo que me alimenta el alma y que es seguir creciendo. Durante años el trabajo lo ha sido todo para mi, dejé familia, parejas…hice lo indecible para ser periodista. Ahora quiero trabajar para vivir, que el trabajo no lo sea todo. El periodismo era como un amante exigente que me estaba consumiendo por completo.
Por el momento estoy de maestra sustituta de español en un colegio católico…qué he aprendido? Que no quiero ser maestra de escuela superior toda mi vida. Me gusta enseñar eso sí, pero no a muchachos que no se están quietos, que no se callan, que tienen una pavera inmensa. Próximos retos….bueno en enero empiezo a trabajar de traductora en el distrito escolar de mi ciudad. También en enero empiezo a estudiar otra vez, sólo por el placer de estudiar…y para asombro general la clase que escogí fue matemáticas, mi gran cuco. Quiero cultivar otras facetas, adquirir otros conocimientos. Me atrae mucho la enfermería. Desde que dejé el periodismo he vuelto a escribir casi todos los días, he vuelto a leer intensamente. Ya casi tengo otro libro de poesía listo. Estoy escribiendo una novela y estoy bien dedicada. Siento que me he liberado de un peso inmenso y tengo unas ganas inmensas de seguir creciendo.

Comments: Post a Comment

Subscribe to Post Comments [Atom]





<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Subscribe to Posts [Atom]

Awilda Ivette Castro
Awilda Ivette Castro
Create Your Badge